El
recordado Julián Sánchez Parra gustaba narrar que además de la carrera de
embolsados, campeonato de truco y el desafío del palo enjabonado, se llevó a
cabo una loca competencia en donde participaron con triciclos, bicicletas de
carrera y de paseo. El vecino Feliciano “Chano” Echagüe venía encabezando el
lote cuando un huellón lo hizo volar por el aire, caída que se la dedicó al Presidente de la Comisión Organizadora.
El clima festivo, el éxito en la recaudación, y la masiva participación, impulsó
la idea de fundar un club. Con el mismo entusiasmo y constancia con que
colocaba los baldosones, tarea que los vecinos comprometidos realizaban al
regreso de sus trabajos (tarea voluntaria, gratis), don Machuca se abocó a la
tarea de organizar la fundación de un club en el barrio sin nombre, pero denominado
peyorativamente “Villa Cartón”.
En el
testimonio que “Cococho” Amendolara brindara en Las vacas vuelan, recordó ser uno de los socios fundadores en 1956.
Por tradición oral, sabemos que el acta de fundación fue firmada por Anastacio Roque
Machuca, Dante Hércules Magrassi, y Antonio Pascual Cicioli.
Desde
el inicio se organizaron bailes familiares realizándose el primero en la casa
de don Osvaldo (¿Urbano?) González, el mismo lugar y dueño del espacio en dónde
se fabricaban los baldosones (Pueyrredón y Lavalle). El escenario, ubicado en
el patio de la casa, fue una carreta de don Sierro (con la que había venido de
La Pampa), con la actuación del conjunto Dalto
(de T. Suárez). Con acordeón o bandoneón y una guitarra, tocaron de todo un poco.
Fue todo el barrio, fue un éxito.
Otros
bailes posteriores se hicieron en un lote que prestaba el vecino Doria, cerca
de la parroquia. Se preparaba bien la tierra, se barría y de tanto pisar se
endurecía, manteniéndola regada.
En
Ezeiza eran pocos, pero la muchachada de otros barrios se juntaban y acudían,
como por ejemplo lo solían hacer Eligio Cresmani, Laura Vagnoni, Alda Vodopivec, la Chichina
García, los hermanos Arruíz, Del Santo, los hermanos Arocena, los Vila, los Corradini,
Bengolea y Lidia Panza, entre los apellidos que hemos podido rescatar. María
Luisa “Chichí” Buffet, recordaba que su mamá no la dejaba ir porque sostenía
que eran “muy matones”.
Así
nació el Club Unión Vecinal, hoy con sede en Gral. Paz 147, el que diera ese
hermoso nombre al querido barrio de José María Ezeiza.
Por: Juan Carlos Ramirez Leiva.
El periodista Carlos Condenanza, aporta el dato que la fundación se llevó a cabo el 20 de junio de 1952. En lo personal, creo que esa fecha corresponde a cuando se llevó a cabo la kermes en donde surgió la voluntad de crearlo, concretándose la voluntad vecinal en fecha posterior.
ResponderEliminarJuan Carlos Ramirez Leiva.
Editor
En la foto está mí abuelo Loy Néstor Valderrey y mí Bisabuelo Anastacio Roque Machuca!! Hermoso!!
ResponderEliminarHola, indica en la foto quienes son
EliminarYo conocí a ellos pero no me acuerdo ya que tendría 5 años. Yo vivía a la vuelta de Valderrey. Urquiza y gral Paz. Crecí oyendo tangos que ponían todas las tarde por parlante. Que linda infancia.