domingo, 26 de mayo de 2013

Bolitas


Alejandro Dolina es uno de los que mejores han descriptos los barrios, su gente, los juegos. Entre ellos, se encuentra "esta bonita página":






"LAS BOLITAS. Se trata de pequeñas esferas, casi siempre de vidrio. Su diámetro es variable: las más chicas se llaman piojos o pininas , las medianas son las más frecuentes y están también las grandes o bolones, que suelen utilizarse en el juego del Triángulo. Años atras podían reconocerse diferentes pelajes de bolitas. Las más hermosas eran las lecheras . En ellas predominaba el blanco, siempre mezclado con algún otro color. Eran semiopacas, no se podía ver a través de ellas y la variedad de diseños y combinaciones era enorme.Estaban también las semi transparentes, de colores fríos, casi siempre verdes o azules. Eran como cachos de sifón. En el interior a veces se adivinaba un filamento gelatinoso y mas bien repugnante. Salvo excepciones, eran unas bolitas de porquería. Sin embargo, la ultima generación de niños jugadores solo conoció esas bolitas.Las lecheras desaparecieron misteriosamente. Miles de personas jamás han visto una. Las mas recientes son las llamadas bolitas japonesas, más livianasque las convencionales, y totalmente inútiles para jugar. Su aspecto es el de una esfera transparente con un papelito de color en su interior.
Todo niño poseía una bolita preferida, que era la que utilizaba para jugar. Se la llamaba puntera. El resto de las bolitas servia para pagar las deuda sprovenientes del juego. Si acaso una racha adversa obligaba al niño a entregar la puntera, se le otorgaba a esta noble bolita el valor de cuatro o cinco. También pueden citarse - como curiosidad - las bolitas de barro, los aceritos y hasta las de plástico (indefectiblemente ovaladas). La identidad de los fabricantes de bolitas es un enigma. Nunca hubo marcas, ni envases ni publicidad. Algo muy raro debe haber en todo esto." (Crónicas del Ángel Gris)

1964 Patio de juegos, ya sin hamacas ni subibajas (Colecc. Rosa Caraballo)
Ningún historiador podría describir con tanta exactitud, lo que significo el juego de las bolitas para las generaciones precedentes. Se jugaba en todos lados, veredas, calles, y en los recreos de la escuela. Recuerdo que en la Nro. 3, hoy ES Nro. 1 de Ezeiza, jugabamos todos en esos patios que ofrecían como alternativa, hamacas y subibajas, de misteriosa procedencia pero que todos usabamos.

Juan Carlos Ramirez