lunes, 15 de junio de 2015

Manuel Belgrano. EL Hombre

El amor a la Patria le impuso todo tipo de tareas. Como economista se preocupó por el cultivo de la tierra, el desarrollo de la industria y del comercio. Como educador se preocupó por el desarrollo cultural como medio imprescindible para alcanzar mayor bienestar y por ello batalló por la creación de escuelas. Por amor a la Patria no dudó en renunciar a los privilegios que le concediera el rey español, para militar activamente en la gestación de la Independencia e integró la Primera Junta de Gobierno Patrio.
El Doctor M. Belgrano redactó un Reglamento para Misiones que puede considerarse como el primer documento constitucional argentino. Fue mediador entre las distintas fuerzas nativas que pugnaron para realizar nuestro destino. La confianza que inspiró fue tal que una provincia entera lo siguió en el éxodo jujeño cuando por amor a la Patria, se asumió como soldado con el grado de General.
Conmemoramos hoy al creador de nuestra enseña nacional, con total respeto por su entrega sin retaceos, aquella que lo llevo a morir en la absoluta pobreza sin renunciar jamás a su utopía libertaria.
Su abuelo fue el propietario, el fundador, de la estancia colonial Los Remedios, cuando aún pertenecíamos al Virreinato del Perú, en 1758. La estancia comprendía los terrenos en donde actualmente se encuentra el Aeropuerto Ministro Pistarini, el Centro Atómico Ezeiza, los bosques y sus piletas, el Barrio Justicialista Uno, la Escuela Hogar, y las unidades carcelarias, entre otras entidades.
Nuestro distrito recuerda a tan gran hombre, con dos arterias: una calle Manuel. Belgrano nace en Sarmiento (ex Ruta Nac. 205), Tristán Suárez, y termina su recorrido en J. J. Vértiz. La otra es la colectora Este de la Autopista Ezeiza- Cañuelas, nace en D. French y termina en la calle Chile.
 Don Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús Belgrano González, pura nobleza a quien la gloria envolvió. Fue un gran Hombre. Honrémosle.

Por: Juan Carlos Ramirez Leiva.

viernes, 12 de junio de 2015

Garay en Ezeiza



La primera fundación de Buenos Aires  la había realizado el Adelantado Pedro de Mendoza, en los primeros días de febrero de 1536. El enclave no resistió el asedio de los querandíes y la corona decidió su despoblación en 1541. A Juan de Garay fue a quien se le encargó fundar una ciudad que estuviera ubicada estratégicamente: la confluencia de los grandes ríos y la salida al Atlántico necesaria para una mejor comunicación con la metrópolis. Para ello, partió de  Asunción el 9 de marzo de 1580.
Los españoles ya habían abierto asentamientos al sur de Lima (Asunción, Santiago, Tucumán, Santiago del Estero, Mendoza, Córdoba) y el descubrimiento de las minas de plata en Potosí hacía necesario el trazado de una ruta segura hasta la península. En 1561, Garay había participado de la fundación de Santa Cruz de la Sierra (actual Bolivia) y hacia el final de esa década se trasladó a Asunción, donde fue nombrado Alguacil Mayor de las Provincias del Plata. Desde esta ciudad partió en 1573 para crear un asentamiento a orillas del río Paraná: Santa Fe de la Veracruz. Para entonces, una ordenanza real de Felipe II establecía con precisión las características de las ciudades fundadas en las colonias españolas. Fue con esta normativa que, nuevamente desde Asunción, partió la expedición de Garay hacia el Río de la Plata.
Las embarcaciones del adelantado zarparon de Asunción con 64 colonos, 53 de ellos, según los registros, nacidos en América, en la futura Paraguay. El 29 de mayo llegaron a las aguas del Riachuelo y se instalaron en un primer campamento.  El sábado 11 de junio, por la mañana,  Garay fundó la ciudad con el nombre de Trinidad, en referencia al día en que fondearon en el Riachuelo, el domingo de la Santísima Trinidad en el calendario católico, dejando la denominación de Santa María de los Buenos Ayres para el puerto.
Garay eligió la actual Plaza de Mayo como lugar apropiado porque el terreno  resultaba amplio y elevado junto al río; instaló el fuerte y la plaza principal, y a su alrededor entregó terrenos para los fundadores y los religiosos.
El acta fundacional desapareció tempranamente, ya para 1707 se dejaba constancia de su inexistencia junto con el Libro de Fundación y los Acuerdos Capitulares 1580 -1605. Nuestro distrito rinde homenaje al fundador de la ciudad cuyo nombre original fue olvidado por el del puerto, con una calle que en J. M. Ezeiza nace en la Av. French al 800 y se extiende hasta la calle Chile.
Por Juan Carlos Ramirez Leiva

martes, 2 de junio de 2015

La tormenta



La tormenta que azotó la localidad de Tristán Suárez en la medianoche del 10 de enero del 2001, provocó grandes destrozos. Algunos sostuvieron que duro no más de diez minutos, pero para todos fue una eternidad. Ráfagas de viento de más de 120 kilómetros por hora dejaron un panorama desolador, con viviendas destrozadas, árboles caídos y partidos al medio, y por supuesto, voladuras de techos y chapas retorcidas. Esa trágica noche provocó la muerte de una mujer de 60 años, quien falleció de un paro cardíaco al ver aterrada, que el techo de su casa se volaba. No tan lejos de allí, en Carlos Spegazzini, se llevó la vida de una niña de cinco años, la hija de Fortunato Pacheco y Cecilia Publisi; su casa quedaba en Pringles entre Martín García y Jujuy y el árbol estaba ubicado a diez metros de la vivienda, pero cayó con una fuerza tal que desplomó la pared como si fuera de papel.
La fuerte tormenta comenzó pasada la medianoche  y convirtió al conurbano en una verdadera boca de lobo. A las 0.25, se quedaron sin energía 750.000 clientes de Edesur debido a la salida de servicio de líneas de alta tensión de 500 kw del Sistema Argentino de Interconexión (SADI). Además, un tanque que contenía diez mil litros de agua cayó por los fuertes vientos sobre fuentes de alimentación de dos centrales de la empresa Telefónica de Tristán Suárez. El saldo fue que unas 6500 líneas quedaron fuera de servicio en esa madrugada.
EP 19 "25 aniversario"
Pese a que la magnitud de los daños, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) definió el temporal como una "tormenta severa". Así lo dijo el licenciado Hugo Hordij, jefe del Centro de Análisis Climático del SMN: "Las dimensiones de los daños y la extensión del temporal hacen pensar que fue una gran tormenta severa, con vientos superiores a los 120 kilómetros por hora. No tenemos información precisa para decir que haya sido un tornado". Para hacer más clara su explicación graficó: “Es como un chorro de agua que choca contra el suelo y se desparrama horizontalmente”.
Fue un verano caluroso. La sensación térmica quebró el récord histórico ese enero del 2001, cuando llegó a los 44,9°. Los valores “promedios normales de temperatura máxima” en enero se ubican “en los 29,9°, aunque es habitual que se registren días con marcas térmicas por encima de los 32°”. La máxima de enero, desde 1906 cuando se inauguró el registro, se vivió en 1957 con 43.3°.
Ese 10 de enero de 2001, el fuerte e inesperado viento huracanado, voló los techos de tres aulas y deterioró la estructura de otras dos y del SUM de la hoy EscuelaPrimaria Nº 19. El inicio de las clases se postergó hasta mediados de abril, en tanto la DGCyE se ocupaba de la reconstrucción y reparación de los daños.
La empresa contratada, Dodero Construcciones, abandonó la obra sin terminar aduciendo falta de pagos, y recién en el 2002 continuaron las obras que se paralizaron hasta ese entonces. La crisis económica desatada entre 1998 y 2002 impacto en la educación como en el resto de las actividades. Esta situación imposibilitó satisfacer las demandas de vacantes de la Comunidad Educativa, debiéndolas derivar hacia las escuelas EGB Nº 16 Y 24.

Por: Juan Carlos Ramirez Leiva.

La escuelita verde



Dedicada a Don Carrizo.
La Escuela Nº 19 surgió de la necesidad de la Comunidad. La población del Barrio Vista Alegre de la Ciudad de Tristán Suárez crece y creció considerable y constante. Calles de barro sin alumbrados ni veredas, la escuela 2 (ex 4), la 14 o la 16, estaban lejos… la búsqueda de una solución imperaba y las acciones llegaron desde la voluntad de algunos comprometidos vecinos que iniciaron las gestiones en La Plata. Sus apellidos, no los tengo y quizás eso sea lo lindo, que las grandes obras sean el resultado de la Comunidad y no de héroes solitarios.
Las respuestas de la provincia comenzaron bajo la gobernación del Dr. Alejandro Armendáriz (1983-1987), quien dispuso la creación de más de 560 escuelas y jardines de infantes y remodelaciones de edificios que permitieron incrementar en 3.400 el número de aulas, y la designación de 24.000 docentes[1]. En lo que atiene a nuestro distrito, por entonces pertenecíamos a Esteban Echeverría, se firmó el Acta Resolutiva Nº 161/86 disponiéndose la creación de la Escuela Nº 57[2].
La aventura comenzó el 23 de febrero de 1990, cuando para albergar a los 497 niños que la inauguraron se instalaron en la esquina de las calles Saavedra y Los Manzanos, una construcción de mampostería para la pequeña cocina y los sanitarios, además de las 7 aulas modulares de fibra de vidrio de color esperanza. Nacía así, la leyenda de la “escuela verde”. Asumió transitoriamente la dirección la Sra. Cristina González, le siguió la Sra. Gladys Gil, y finalmente se designó a la Sra. Cristina Seoane como directora titular.
Llegamos a los tiempos en que el gobernador Eduardo Duhalde consiguió la aprobación del Fondo de Reparación Histórica del Cono Suburbano, y con esos fondos fue posible una amplísima obra pública. En el Barrio Vista Alegre, la matrícula siguió creciendo y en 1993 se construyeron dos aulas de mampostería y, aquí viene lo bueno, se iniciaron las obras del actual edificio terminado en 1995 en la manzana de enfrente, con entrada por Los Girasoles. El edificio contaba con diez aulas a los que hubo que sumarle otras dos y un nuevo pabellón sanitario en 1997, y un año después siguió ampliándose con otro nuevo salón de clases.
El inicio del Ciclo Lectivo 1996, contó con la presencia del Sr. Intendente Alejandro Granados, primer jefe comunal que se dio el nuevo Distrito Ezeiza, tras conseguirse la anhelada separación del Distrito Madre. También estuvieron presentes las autoridades del Consejo Escolar, el cuerpo de Inspectores, y toda la Comunidad Educativa.

Por: Juan Carlos Ramirez Leiva

[1] http://www.diariodemocracia.com/notas/2012/7/29/. Visitado 22/05/2015.
[2] Expediente de creación Nº 580-00313512/85 y Expediente de construcción Nº 5848-137187-1