jueves, 3 de septiembre de 2020

Ferreteros

Entre los comercios tempranos de la naciente urbanidad de José María Ezeiza, no podemos olvidarnos de los ferreteros. No he podido precisar aún si primero fue el corralón del Ñato Rodríguez o el comercio de Gravanago, en donde los ezeizences se abastecían de artículos del ramo. Tiempos después se sumaría Magliola y otros comerciantes que si bien vendían materiales de construcción (corralones), también proveían y asesoraban a sus clientes en el rubro ferretero. 
El corralón ferretería de Norberto “Ñato” Rodríguez, tenía sótano con respiraderos hacia la calle, y un largo mostrador en un local grande, con salida a la ruta 205 y a la calle Ramos Mejía (ahora, Galería El Edén). Sus estanterías eran altas, de madera pintada de verde aún por los ’60. En 1949 ya estaba el corralón del Ñato, como también estaba la ferretería de García, que además vendía artefactos electrodomésticos (aún en actividad, aunque ya no como ferretería), al lado del almacén de Vega frente a la inexistente aún, plaza Manuel Belgrano. No estaría completa esta referencia si no incluimos a Casa Magliola, que vendía de todo; se encontraba sobre la ex ruta 205 frente a la hoy estación de servicio Exxon, entre Paunero y Roca. En Deán Funes y Chacabuco, supo encontrarse el corralón ferretería de Denís y hay quienes recordaban que Denis también instalo una ferretería sobre French al lado de la panadería de Curra. 
Probablemente a los negocios ferreteros, los haya precedido el negocio que fuera primero de Gaddini y luego perteneciera a Elisagaray y a Boulán. Tenía un frontón de pared donde se jugaba a la pelota (creo que tenía salida por Ramos Mejía), y el almacén se entraba desde la ruta, un almacén muy largo con pisos de madera que se movían al compás de los que por arriba caminaban. Allí podía encontrarse desde artículos comestibles, recuerdo un tragamonedas, y…. artículos de ferretería. 
Probablemente a finales de la década del ‘50 y en los ’60, quien además de sanitarios, algo de bazar y pinturería, presentaba un surtido más completo de ferretería, fue el famoso El Palenque, de Gravanago. Ubicado sobre la ruta y Emilio Mitre (ex Estevecorena).
Cerramos esta nota con el recuerdo de un querido ferretero cuyas inquietudes lo llevaron rápidamente a participar de los movimientos emancipadores del distrito. La Comisión Pro Autonomía de Ezeiza y su zona de influencia se creó el 27 de junio de 1987 y poco después, el 18 de diciembre de ese mismo año, se celebró una reunión en donde se definió la nominación de la Cámara de Comercio, Industria, Profesionales y Bienes Raíces de José María Ezeiza; de esa Cámara, Minitti fue socio fundador y primer presidente. Roberto “Tano” Minitti, quien había nacido en Trípoli (capital de Libia, África), en tiempos en que era una colonia italiana, supo ganarse el afecto de sus clientes por la cordialidad y predisposición a enseñar e identificar a qué nos referíamos, cuando le pedíamos un “cosito” o “pituto”. 

Juan Carlos Ramirez Leiva